Están por todas partes, viven, comen, estudian, hasta
se divierten con nosotros. Contrario a
lo que se cree en Latino América, psicópata no es lo mismo que asesino en
serie. Pues un psicópata no es solamente el que agrede, asesina o atenta contra
la integridad personal. También hay rasgos de psicopatía en el timador y en
personas que ejercen funciones de liderazgo. ¿Cómo reconocerlos? El programa
tecnológico en Investigación Criminal, de la Universidad Manuela Beltrán,
analizó algunos de los perfiles más reconocidos del mundo.
“Hitler tenía unos rasgos de psicopatía muy
particulares y nunca mató a nadie con su propia mano. Si hablamos del perfil de
algunos dirigentes mundiales, vamos a encontrar que tienen varios rasgos de
psicopatía. Son manipuladores o tienen un grandioso sentido de autoimportancia,
narcisistas de personalidad en relación con que buscan el beneficio particular
antes que el beneficio general, tienen facilidad impresionante para mentir”,
explicó Belisario Valbuena Trujillo, Especialista en Psicofisiología Forense y
docente del programa en Investigación Criminal, de la Universidad Manuela
Beltrán.
Otro caso reconocido es el de Juan Carlos Bentancourt,
un estafador internacional de nacionalidad colombiana buscado en 29 países por
la INTERPOL. Este delincuente gozaba de un perfil elevado: Hablaba 6 idiomas,
tenía un coeficiente intelectual bastante alto y gran habilidad para las
relaciones sociales. Para engañar a sus víctimas, algunas veces decía ser hijo
de diplomáticos, en otras que era huérfano de una etnia gitana de España y
hasta llegó a presentarse como un millonario árabe.
“Era astuto, encantador y convincente; a través de la
conducta verbal de los demás, sabía identificar sus gustos y preferencias para
así crear vínculos y estafar a las personas. Este psicópata atentaba contra el
patrimonio económico y no contra la integridad personal”, señaló el docente de
Investigación Criminal, de la UMB, Belisario Valbuena. Para el especialista en
Psicofisiología Forense, además de la habilidad para persuadir, también es
importante resaltar que el trabajo de un psicópata se facilita cuando sus
interlocutores no tienen la capacidad de tomar decisiones. “Esta situación se
vive a diario en bandas criminales y grupos al margen de la ley como las
Autodefensas, ELN y FARC, donde los superiores convencen fácilmente a los
subalternos con Teoría Marxista Lenilista; es decir, poniendo al Gobierno y a
las clases económicas dominantes como el enemigo del pueblo. A esto se le llama
Trastorno Ideológico Inadvertido”, señaló el psicólogo Belisario Valbuena.
El docente del programa tecnológico en Investigación
Criminal de la UMB aseguró, además, que los cabecillas de frentes o cuadrillas,
quienes ocupan los lugares superiores dentro de la jerarquía, suelen tener
rasgos parecidos a los del psicópata, pues poseen habilidades para manipular e
influir en los demás. Es así como también influye el mayor nivel de estudios y
de permanencia en la organización.
“Un ejemplo es el de alias Cesar, el líder de la
cuadrilla primera de las FARC, quien fue capturado en la operación Jaque. Este
delincuente que llevaba más de 20 años en la organización, era valorado por sus
capacidades intelectuales y facilidad para persuadir a las masas. Además, tenía
una personalidad histriónica, le gustaba ser el centro de atención. Esto fue
precisamente lo que se aprovechó en la Operación Jaque, en la que fue distraído
por la cámara y el supuesto periodista”, asegura el especialista en
Psicofisiología Forense.
Para Belisario Valbuena es claro que las grandes
operaciones para capturar delincuentes deben tener un trabajo de perfilación
psicológica, pues existen diferencias entre quienes agreden la integridad
física de una persona y quienes atentan contra el patrimonio económico. El
primero, por lo general, es una persona que en su infancia sufrió agresiones
físicas o psicológicas, abuso sexual por parte de alguien importante para él
como su padre, madre, padrastro o cuidador y/o abandono físico o psicológico.
SÍNTOMAS
Y TIPOS DE PSICOPATÍA
Desde
la pre-adolescencia se puede vaticinar un posible delincuente.
Comportamientos como la deserción escolar, hurtos (así sean pequeños), agresión
física a personas y mascotas, son algunos de los síntomas. Según el
especialista en Psicofisiología Forense, Belisario Valbuena Trujillo, “Los
niños que maltratan animales domésticos, empiezan a tener un rasgo psicopático
de personalidad”. En sus investigaciones, el docente del programa en
Investigación Criminal de la Universidad Manuela Beltrán conoció una banda
criminal que atentaba contra las personas y descubrió que varios de los
integrantes se entrenaron apuñalando caballos.
El
psicópata adquiere los rasgos de su psicopatía desde muy niño. Es casi unánime
en ellos la ausencia de la figura del padre. Suelen haber vivido en el seno de
familias en las que el padre se había ido del hogar, había fallecido
tempranamente o, simplemente, se había despreocupado de la educación de los
hijos. De hecho, los psicópatas jamás mencionan al padre; parece como si jamás
lo hubieran tenido. Desde el momento en que comienza la época de socialización
evidencian unos rasgos que los hacen radicalmente diferentes de otros niños.
Muestran un ego particularmente crecido y hostil ante cualquier crítica.
Aprenden a mentir y a enmascarar sus sentimientos. El cerebros de los
psicópatas no funciona como los demás, tienen una desconexión entre la zona
orbitofrontal y las estructuras subcorticales. De ahí que, pequeños impulsos
emocionales les provoquen reacciones agresivas incontroladas.
Para
identificar los dos tipos de psicópatas que existen: psicópata
criminal y psicópata integral, el docente Belisario Valbuena resalta que “en el
primero la persona empieza desde temprana edad a involucrarse en diferentes
tipos de delitos; y a medida que pasa el tiempo va perfeccionando sus
habilidades para delinquir. A esto se le llama una escalada de crimen”. El
psicópata integrado, por su parte, es aquel que lleva una vida ‘normal’, tiene
una profesión u oficio y termina involucrado en un crimen serio contra la
integridad personal o el patrimonio económico (a gran escala). El psicópata
integral funciona en una lógica propia: todo lo que le favorece y le facilita
alcanzar sus objetivos es bueno, todo aquello que le impide llegar a ellos, es
negativo. En su estructura mental, no hay lugar para la lógica cartesiana: su
fantasía le marca objetivos que pone en marcha a través de su voluntad, sin
importarle ningún otro razonamiento.
“Un ejemplo de este caso, es el del padre de familia
de Chía, quien se vio involucrado en la desaparición y muerte de su propio
hijo. Este hombre era conocido por la comunidad como una persona trabajadora,
responsable y retraída. Es así como el psicópata integrado es mucho más difícil
de detectar y es mucho más peligroso”, explicó el docente Belisario Valbuena,
del programa en Investigación Criminal, de la Universidad Manuela Beltrán. Según un informe de la Organización Mundial
de la Salud (OMS), sobre salud mental en el mundo, el 2% de la población
mundial padece psicopatía. De allí, la importancia de saber cómo detectar y
cómo evitar ser víctima o facilitador de estas personas. (Por Belisario
Valbuena)